Los Colegios Oficiales insisten siempre en concienciar a la población sobre la importancia de que ciertos tratamientos dentales sean realizados EXCLUSIVAMENTE por dentistas en clínicas especializadas, garantizando así la seguridad y salud bucodental de los pacientes.
Vamos a destacar estos 4 tratamientos, que NO DEBES REALIZAR sin un profesional de la odontología:
- Tratamiento periodontal: Aborda la periodontitis, una infección de las encías que puede llevar a la pérdida dental y otros problemas de salud. Solo un dentista puede realizar raspados, curetajes o cirugías necesarias.
- Blanqueamiento dental: Un procedimiento estético que requiere el uso de agentes blanqueadores y debe ser supervisado por un dentista para evitar complicaciones.
- Tratamiento de ortodoncia: Corrige la malposición dental y alteraciones maxilares. Solo un dentista puede prescribir, realizar y hacer seguimiento de estos tratamientos, incluyendo la colocación de brackets y el control de alineadores.
- Toma de impresiones y registros para prótesis dentales: La creación de moldes precisos para prótesis y otros aparatos dentales debe ser liderada por un dentista para asegurar tratamientos personalizados y eficaces.
¿QUE RIESGOS PUEDE HABER?
La realización de tratamientos dentales por profesionales no cualificados conlleva una serie de riesgos generales que pueden comprometer seriamente la salud bucodental.
Un diagnóstico incorrecto puede pasar por alto problemas subyacentes como caries, enfermedades de las encías o maloclusiones, lo que lleva a tratamientos ineficaces o incluso perjudiciales.
La falta de esterilización adecuada de los instrumentos y el desconocimiento de técnicas asépticas aumentan el riesgo de infecciones. Los procedimientos mal realizados pueden dañar tejidos blandos como dientes, encías y nervios.
Además, tratamientos mal planificados pueden alterar la oclusión, causando dolor, dificultad para masticar y otros problemas.